Se celebró el primer encuentro en Venezuela para impulsar esta nueva iniciativa que busca la protección del 80% de la región amazónica para el año 2025, con énfasis en el fortalecimiento de los pueblos indígenas.
La Amazonía se extiende por 8 países de Sur América y una región de ultramar de Francia: Bolivia, Brasil, Colombia, Ecuador, Guayana Francesa, Guyana, Perú, Surinam y Venezuela. Allí, se encuentra el bosque tropical continuo más extenso del planeta, vital para la regulación y la estabilidad climática global, emporio de altos niveles de biodiversidad y hogar de millones de indígenas. Actualmente, la Amazonía se encuentra en medio de una crisis a causa de las actividades humanas, en un punto de inflexión, lo cual hace imperativo la toma de decisiones acertadas y de acciones conjuntas para su conservación. En este sentido, resulta esencial considerar que la gestión de la Amazonía por parte de los pueblos indígenas y la defensa de sus territorios ha demostrado ser una medida eficaz de conservación, aunque hasta ahora ha recibido muy poco apoyo de los gobiernos y la comunidad internacional.
Las organizaciones indígenas amazónicas, que representan a 511 pueblos ancestrales junto a sus aliados, se unen en un llamado para pedir un pacto global que logre la permanente protección del 80% de la Amazonía para el año 2025. Esta iniciativa, llamada Amazonía por la Vida, es liderada por la Coordinadora de Organizaciones Indígenas de la Cuenca Amazónica (COICA) y apoyada por Stand.Earth, además de un comité directivo que reúne varias organizaciones dentro de la región y fuera de ella. La misma inició con la Moción 129 aprobada unánimemente en el Congreso Mundial de la Naturaleza, de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), en septiembre del año pasado. Esta es una medida urgente para evitar superar el punto de inflexión en la Amazonía. Si la deforestación y la degradación combinadas cruzan el umbral del 20% en esta región, los científicos advierten que el sistema alcanzará un punto irreversible de sabanización de todo el ecosistema. El tiempo de actuar es ahora.
Desde Venezuela se hace necesario establecer una coalición que impulse este esfuerzo, partiendo del intercambio de conocimientos, saberes, experiencias y realidades entre los diversos actores que hacen vida en nuestra Amazonía. En el marco de este llamado varias organizaciones indígenas, académicas y de la sociedad civil se están uniendo para proponer un plan nacional que permita lograr esta ambiciosa meta, cuyo desafío puede apreciarse al considerar que la Amazonía venezolana comprende el estado indigena de Amazonas, Bolívar y Delta Amacuro, abarcando casi el 50% del territorio terrestre del país.
En la región habitan al menos 31 pueblos indígenas que hacen vida y conocen en primera línea la realidad que acontece en sus territorios y los mayores retos para protegerlos. Dado que la Organización Regional de los Pueblos Indígenas del estado Amazonas (ORPIA) es la organización miembro de COICA en Venezuela, mientras Provita es una ONG miembro tanto de UICN como de RAISG, COICA invitó a ambas a impulsar la propuesta “Amazonía por la Vida” en Venezuela. A este grupo se han sumado el Grupo de Trabajo de Asuntos Indígenas (GTAI) de la ULA, Fundación Tierra Viva, Phynatura y la Oficina de Derechos Humanos del Vicariato Apostólico de Puerto Ayacucho, como comité directivo del esfuerzo.
El pasado 01 de septiembre de 2022 se celebró un taller de trabajo con representantes de varios pueblos indígenas de la Amazonía venezolana (Arawako, Baniva, Baré, Jivi, Kurripaco, Piapoco, Uwottuja, Warao, Warekena, Yabarana, Ye’kwana y Yeral). En el evento también participaron otras organizaciones indígenas (Escuela Baré, Kubawi, Kuyujani, Kuyunu, Oipus, Oiyapam, Omida, Opica, Rajia, Sidea, Unión de comunidades indígenas Warao, Unuma y Wanaaleru) de la mano con el comité directivo y otras instituciones (Handicap Internacional, IVIC, Universidad de East Anglia de Inglaterra), con la finalidad de promover la iniciativa Amazonía por la Vida en Venezuela.
Eligio Dacosta, Coordinador General de ORPIA, señaló que “la Amazonía forma parte de nuestra vida y cada vez son mayores los retos para mantenerla a salvo, pero parte del camino son las alternativas de vida que brindan los pueblos indígenas al territorio. Aunque no sea fácil, nada es imposible”.
En el evento, representantes de los diferentes pueblos indígenas plantearon la situación de sus territorios, problemas y propuestas. Uno de los principales puntos tratados fueron los procesos de demarcación y autodemarcación. La constitución venezolana contempla mecanismos innovadores para su reconocimiento, que deben reactivarse. Vladimir Aguilar, Coordinador del Grupo de Trabajo sobre Asuntos Indígenas (GTAI) de la Universidad de Los Andes (ULA), mencionó que “el punto en común de todas las iniciativas es el territorio, por lo que la demarcación y autodemarcación debe ser una prioridad de la iniciativa”.
También se discutió sobre la gobernanza y gestión territorial, manifestando que es indispensable apoyar el fortalecimiento de los pueblos indígenas, involucrando a los jóvenes como generación de relevo en la lucha por sus derechos ancestrales y asegurando la salvaguarda y autodeterminación de los pueblos en aislamiento y contacto inicial. Además, varios de los territorios son pluriticulturales, lo que hace compleja la demarcación y autodemarcación.
Los pueblos indígenas han habitado ancestralmente la Amazonía por miles de años, conviviendo de forma armónica con todos los procesos que allí ocurren. Gregorio Mirabal, coordinador de la COICA, indicó que “cuando se habla de biodiversidad, se habla de pueblos indígenas, no puede ser separado, somos uno solo en la Amazonía”. Además, Gregorio refirió que para ellos, Amazonía por la Vida “es un llamado para ponerse de acuerdo en qué debemos hacer para salvar la Amazonía porque no es un problema de los pueblos indígenas solamente”.
Este evento resaltó la necesidad de visibilizar los esfuerzos, que desde hace décadas los pueblos indígenas hacen para conservar y aprovechar de manera sostenible la Amazonía venezolana. También se planteó la necesidad de continuar con futuros talleres de discusión de Amazonía por la Vida en Venezuela. Lo importante es que no se está partiendo de cero, hay un camino recorrido con experiencias valiosas. Sin embargo, se debe desarrollar una estrategia que permita avanzar y alcanzar las metas de la iniciativa. Estos esfuerzos se realizarán en conjunto con los demás países y pueblos indígenas de la Amazonía.
Próximamente, esta iniciativa continuará sumando aliados desde múltiples sectores y áreas de experiencia en el país y a nivel internacional. Todos tenemos un rol en la conservación de nuestra Amazonía en pro de cumplir el objetivo fundamental de salvaguardar al menos el 80% de la Amazonía para el año 2025.
“Todos estamos llamados a defender la Amazonía, es la corresponsabilidad de la humanidad”, Anñelito Pacheco, coordinador general de la organización Kuyunu.